Neti, neti es un término hinduista que viene a significar “ni esto, ni aquello”, en el Budismo también se encuentra una práctica del no extremismo llamada el camino del Medio.

Durante estos años he encontrado muchos “Extremistas” del Ving Tsun (en todos sus nombres, wing tsun, wing chun, wing …..), que afirmaban con rotundidad que su forma de entrenar y enseñar el Ving Tsun era sin duda alguna la mejor.

A través de estos casi 25 años de práctica he podido conocer a infinidad de practicantes y maestros que me han hecho comprender que no hay nada mejor, ni peor, sino que lo peor es el extremismo y la creencia que las cosas se deben hacer de una sola manera y las demás están equivocadas.

He visto maestros que su “efectividad”  estaba basada en la fuerza, otros en la velocidad, otros en la explosividad, otros en el control, etc.  Y si cada uno de ellos hubiera sido menos egocéntrico y de una mentalidad más abierta hubiese descubierto que todo está unido y que no existe como dice el principio del artículo “ni esto, ni aquello”. Que ni es tan bueno los puños en cadena, ni el control constante del oponente, ni a la vez es tan mala ninguna de las dos cosas, que ambas usadas en conjunto y de la forma correcta serán dos armas poderosas y no una sola.

Es lamentable ver infinidad de videos en Youtube donde la mayoría de los practicantes de Ving Tsun son apaleados por practicantes de otros estilos. Principalmente debido a que la mayoría de estas personas han sido entrenadas en un falso  “sparring” y han “perdido” el tiempo con técnicas, ejercicios o programas que hoy en día son perdidas de tiempo. En estos videos se ven a practicantes “pegando al aire” o intentando “capturar” al oponente con lap saos, pak saos, bong saos, etc. y sin ningún timing o cambios de velocidad, distancia, enfoque, etc.

“Loi lao, hui sung, lat sao jit Chong”, este kuen kuit lo resume todo, pega cuando el camino este libre y quédate pegado cuando no. No peges al aire y no intentes controlar todas las armas del oponente, no somos pulpos y no existe el control absoluto.

Es labor nuestra como profesores no engañar a nuestros alumnos, hacerles sentir el contacto en clase y aprender de estos errores para no volver a caer en nuestros propios engaños y fantasias.

Y por supuesto yo no estoy libre de haber cometido estos errores…